miércoles, 26 de noviembre de 2008

Un resbalón no es caída, pero 2, 3, 4 o más ya es de pelotuda!



Y escucho de fondo crazy de aerosmith y es así, me vuelvo loca! Me agarran unas ganas desenfrenables de llamarte, sentarte en un sillón, obligarte a que me mires, disfrazarme o ponerme a tono y hacerte un bailecito que roce lo salvaje con lo sexy y te deje patitas para arriba sin saber para que lado correr. En pocas palabras: volarte la cabeza y de paso usar tu cabeza como un revolver como dice soda. Pero es sabido que no hay mas agua para resbalar, en realidad si la hay, pero cada vez tengo más de donde agarrarme así que no debería resbalar, sino estaría en un gran, un gran problema. Con quien, es la pregunta, y principalmente el problema seria conmigo, después con la gente q me hace el aguante todos los días y por ultimo vos, vos serias el gran problema, el broche de oro.

Y entonces paso de la imaginación, de la locura, de lo subida de tono, de la fantasía, de la euforia al piso directamente, sin nada en el medio que frene mi caída. Mi cuerpo y yo, pegando fuerte, durísimo, contra el cemento.

Y acá entra el lei motiv en cuestión, ser boluda o hacerse la boluda? Quizás una mezcla de ambas.

Lo que si se sabe a esta altura es como son las cosas y contra eso, no hay nada que hacer.

1 comentario:

Gastón dijo...

A veces nos precipitamos en caída libre para sentir esa libertad
(y después tener la obligación de levantarnos)

Besos en el aire